Experiencias
A pocos kilómetros al norte del corazón amarillo de Izamal se encuentra la Hacienda Sacnicté, una hacienda del siglo XIX magistralmente restaurada que ha renacido como un sereno refugio boutique. El nombre «Sac Nicté», que significa «flor blanca» en maya, capta el encanto elegante y discreto de la hacienda.
Construida originalmente en 1811 y cuidadosamente renovada, la propiedad combina armoniosamente su grandeza de la época colonial con las comodidades contemporáneas En el interior, la íntima colección de sólo diez habitaciones y suites de estilo individual -desde el encantador alojamiento Deluxe hasta la palaciega Suite Presidencial- celebra espaciosas distribuciones, techos altos y una decoración de buen gusto que respeta el alma histórica de la hacienda.
